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El trabajo colaborativo es una nueva forma de organización característico de las organizaciones de la Economía Social y que se ha transformado con la utilización de herramientas y aplicaciones digitales. Ambos elementos en buena combinación permite a las empresas crecer en salud, con bienestar para la organización y sus integrantes, así como adaptarse a los nuevos retos del mercado en los que se mueve. 

El trabajo colaborativo 

El trabajo colaborativo se basa principalmente en la interacción necesaria de todas las personas que participen en un determinado proyecto u objetivo. 

El trabajo colaborativo requiere por tanto: capacidad de integrar ideas distintas, empatía y la creación de respuestas compartidas que aglutinen todas las aportaciones de las personas participantes en este trabajo. 

En contextos digitales, en los que el distanciamiento físico es una variable, el proceso de pensamiento colectivo y co-creación debe valerse de la tecnología y la competencia digital de las personas para que pueda llevarse a cabo. 

Para generar un buen trabajo colaborativo necesitamos enfocarnos en pocas actividades, pero bien estructuradas; disponer de la información justa y necesaria sin saturar pero dando los recursos necesarios; gestionar bien los tiempos, esto es, que no se acelere el proceso convirtiéndolo en una experiencia vertiginosa, ni tampoco lo dilate paralizándolo; si bien lo remoto permite una inmediatez en las respuestas, es importante dejar un espacio a la reflexión y el afianzamiento de los pasos y el conocimiento que se genere. 

La inteligencia colectiva digital 

Amalio Rey define Inteligencia Colectiva como “la capacidad de un grupo de individuos para optimizar colaborativamente las decisiones que le afectan como colectivo”, y sigue, “esa capacidad se manifiesta, por lo tanto, a través de un proceso que es colaborativo, y un resultado que consistiría en escoger las mejores opciones posibles para las expectativas y el bienestar del grupo”. 

En otras palabras, y siguiendo al mismo autor, la inteligencia colectiva se crea cuando un conjunto de personas hace cosas juntas. 

En un entorno digital, ese “hacer las cosas” viene mediado por el uso de la tecnología y en muchos casos por la distancia física de las personas. Así, de forma remota, las personas contribuyen individualmente con sus aportaciones para generar una respuesta colectiva frente a un dilema o problema. 

En el contexto digital, esto supone para las organizaciones diseñar una serie de estrategias participativas que superando las distancias físicas y apoyándose en el uso de la tecnología permitan llegar a soluciones colectivas. 

Desde la Escuela de Economía Social hemos realizado una investigación sobre la Digitalización y los retos y oportunidades que presenta para las organizaciones de Economía Social. Te invitamos a participar en el Webinar «La Transformación Digital en la Economía Social. Claves y Aprendizajes», donde compartiremos los aprendizajes de la investigación que hemos realizado desde la Escuela de Economía Social y se presentarán los recursos del MOOC (curso online y abierto) que hemos creado sobre la transformación digital de la economía social.

Inscripciones Webinar en este enlace: https://form.jotform.com/213264767671362

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*Esta entrada ha sido realizada en el marco del proyecto: “Estudio sobre la Innovación en las Organizaciones del trabajo y las competencias para la transformación digital de las Empresas y Organizaciones de Economía Social» financiado por la Consejería de Empleo, Formación y Trabajo Autónomo de la Junta de Andalucía.

Photo by Ben Harritt on Unsplash

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