Durante este año hemos organizado o participado en un gran número de encuentros divulgativos para informar sobre la figura de la comunidad energética cooperativa, hemos visitado distintos pueblos y ciudades andaluzas, y colaborado en espacios virtuales con entidades como la Federación Andaluza de Municipios y Provincias o la Agencia Andaluza de la Energía.
He visto como ante la percepción de un proceso complejo y largo muchas personas mostraban una mezcla de enfado y decepción.
Y he observado como lo fácil y lo difícil o lo rápido y lo lento se interpreta como algo binario y polarizado en vez de como un continuo que nos reta, y eso lleva a dar por buenas soluciones “precocinadas”, fáciles y rápidas, que se alejan de la esencia de las directivas europeas que nos abren resquicios para que la ciudadanía seamos parte activa del modelo energético.
¿Cómo hablar de comunidades energéticas en un contexto donde la tendencia es la mercantilización y servitización por los actores tradicionales del sistema energético?
No se me ocurre otra manera que hacerlo desde lo personal, desde la alegría de ser parte de algo que comienza de manera discreta pero que se intuye como transformador.
El pasado 7 de julio se celebró la asamblea constituyente de Arroyo Alumbra S. Coop. And. la comunidad energética cooperativa de Arroyomolinos de León (Huelva). Un proceso largo y complejo pero ilusionante y, sobre todo, enriquecedor; un proceso que ya tenía un recorrido previo y mucho camino por delante.
Ha sido el fruto de un microproyecto desarrollado en el marco de “Acciones para el alcance de metas de los objetivos de desarrollo sostenible desde la participación de los actores locales: un enfoque territorial. ACCIONAD-ODS”, cofinanciado por el programa operativo de cooperación territorial España-Portugal (POCTEP) Interreg V y entidades socias de FAMSI. Microproyecto en el que hemos colaborado la Escuela de Economía Social con dos empresas del territorio, Dieciesiete S. Coop. And. y La Senda Digital.
Se han llevado a cabo 8 talleres con vecinas y vecinos del pueblo interesados en el tema, en los que se buscaba construir un modelo de comunidad energética que no dejara a nadie atrás y el resultado inicial ha cumplido con creces las expectativas de todas las personas que han participado.
¿Qué hemos conseguido con estos talleres?
- Mejorar la capacitación de las personas participantes, aumentando su nivel de interés por la iniciativa y facilitando la participación real y efectiva.
- Generar un grupo motor diverso, en género, edad, habilidades e intereses.
- Empezar a pensar en el proyecto colectivo como mucho más que la suma de individualidades.
- Redactar un objeto social que mira a largo plazo, situado dentro de lo posible pero pensando en lo deseable.
- Ilusionar para seguir dando pasos hacia la soberanía energética.
- Contribuir a la territorialización del ODS 11 »Lograr comunidades inclusivas, seguras, resilientes y sostenibles» y del ODS 13 «Adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos».
Aunque creo que la mejor manera de conocer el proyecto y compartir la emoción es ver un video resumen pinchando aquí.
Imágenes: La Senda Digital
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Esta entrada ha sido realizada en el marco del proyecto Acciones de difusión y promoción para el fomento de las comunidades energéticas en Andalucía bajo modelos de la Economía Social financiado por la Consejería de Empleo, Formación y Trabajo Autónomo de la Junta de Andalucía.
